MASCOTAS VS PIROTECNIA. ¿CÓMO AYUDAR A TU PERRHIJO?
La parte negativa de las festividades como Navidad y Año Nuevo son los fuegos artificiales. Quizás a los niños les causa asombro y diversión, pero no sólo son malos para el medio ambiente sino para nuestras mascotas.
No existe una manera de predecir cómo será el comportamiento de una cierta raza de perros ante la explosión del fuego artificial, pero lo que es seguro es que les provoca miedo y desesperación. No es algo que deba tomarse a juego, nos estamos acostumbrando a los videos “graciosos” de perritos y mininos reaccionando ante diferentes estímulos, pero resultan extremadamente crueles aquellos en los que ruidos estruendosos forman parte del juego.
Entre las consecuencias al ruido excesivo, la hipersensibilidad auditiva de los animales los desorienta, los puede llevar a escapar sin rumbo. En algunos casos atraviesan vidrios, son atropellados o se lastiman debido a su miedo y desesperación. Si, en el peor de los casos, el miedo los puede llevar a la muerte.
Ahora que conoces el terror y puedes empatizar con tu mascota, te recomendamos lo siguiente para ayudarlo ante los fuegos artificiales:
1- No le des premios ni comida “humana” para tranquilizarlo, porque le puede hacer daño.
2- Déjalo en su habitación favorita de la casa o en algún lugar donde sepas que el escándalo será menor.
3- No lo amarres :( Puede hacerse daño a sí mismo.
4- No lo mediques, en todo caso procura aromaterapia, flores de Bach, reiki o feromonas para tranquilizarlo y enseñarlo a calmarse.
5- Utiliza grabaciones de sonidos de fuegos artificiales días antes de alguna festividad, en volumen bajo y mientras juegas con tu mascota para que se acostumbre con tiempo a este molesto ruido.
6- Ejercítalo constantemente pero sobretodo en días festivos. Cánsalo lo más que puedas para que le sea más fácil dormir.
7- Utiliza el método Tellington Touch, que se basa en amarrar una tela en ciertos puntos sensibles de la anatomía del perro, como las patas, las orejas y el lomo, logrando que se sienta "protegido" y baje sus niveles de ansiedad al oír los estruendos.
Por último, corre la voz. Quizás no logremos que todo el mundo se olvide de los fuegos artificiales o que se prohíban en ciertas zonas, pero podemos pedirle a vecinos y familiares un poquito de piedad para nuestros seres queridos que no pueden evitar este tipo de peligros por sí mismos.