Tequila: ¡El día ha llegado!

Bueno, tampoco es que necesitemos una excusa para celebrar, sobre todo si se trata de acompañar el día con un poco de sal y limón. Este 24 de julio, México y el mundo festejarán el día internacional del tequila y aquí te voy a dar algunos detalles sobre el tequila, su origen y claro, una que otra opción para degustarlo.

El tequila, producto orgullosamente mexicano, fue declarado en 2006 como Patrimonio Mundial incluyendo al paisaje del agave, así como las destilerías más antiguas de tequila.

Su origen:

Pero ¿cuándo se originó el primer tequila? El primer indicio lo podemos encontrar alrededor del año 1538, sin embargo, sobre el cómo se produjo incluye muchas teorías y leyendas, como aquella que dice que todo inicio en medio de una tormenta eléctrica, donde un rayo cayó sobre un sembradío de agaves, quemándolo a grandes temperaturas, levantando un olor agradable a los nativos proveniente de una miel que al fermentarse y consumirla producía poderes relajantes y efectos de euforia.

Lo cierto es que el inicio del tequila fue bastante austero y clandestino, pues durante la colonia sólo se favorecía la importación de aguardientes y vinos españoles, fue hasta el siglo XVII cuando pudieron comenzar su producción oficial.

Su producción:

Para su creación se necesitan por lo menos 10 años de trabajo, desde que lo siembran hasta que madura el agave, y, gracias al avance tecnológico en el proceso de elaboración es posible disfrutar de tequila con un destilado 100% de agave, pero la bebida original es elaborada con un licor que tenga por lo menos un 51% de jugo de agave puro, ya que en caso de contener un porcentaje menor, la bebida resultante sería mezcal, aguardiente, sotol o alguna otra.

Su denominación de origen:

Gracias a la obtención del DOT (Denominación de Origen Tequila), esta hermosa bebida sólo es producida en 181 municipalidades de los estados de Jalisco, Nayarit, Guanajuato, Tamaulipas y Michoacán, pero, ¿en qué nos beneficia esto? Es muy sencillo… si quiere disfrutar tequila 100% original debe ser hecho en México, las destilerías en cualquier parte del mundo únicamente tienen permitido producir y vender destilado de agave.

Cómo se toma:

En coctel, los más conocidos son la paloma, el charro negro, las margaritas… pero si has estado en Jalisco, no podrás negar que no se le comparan a un cantarito, una buena cazuelita o un vampirito.

Para tomarlo derecho puedes intentarlo solito o bien pedir una banderita que consiste en un shot de limón, un shot de sangrita y tu shot de tequila. Como nota, recuerda que el tequila se saborea a traguitos, disfruta de su sabor; no es agua y no se toma de a trancazo, a menos claro, que estés en una fiesta muy loca, hayas perdido en un drinking game o bien necesites agarrar valor.

Experiencias que incluyen tequila:

En el estado de Jalisco muchas de las destilerías ofrecen diferentes tours, desde tomar un tren en el cual te ofrecen tequilas de todos los tipos y después te llevan a la fábrica, o bien sólo cenas con degustación. Sin duda, visitar los estados donde se produce este producto siempre será la mejor opción para conocer más sobre el tema y no quedarte con las ganas de probar el tequila tal cual hecho en casa.